Archivo

Posts Tagged ‘Moral’

Confundir la moral con la ciencia

3 septiembre, 2014 Deja un comentario

(…) Cuando pretende que sus preceptos morales son científicamente válidos, hace que resulte difícil, puesto que es un médico, que los niños y la mayoría de los legos en la materia se planteen dudas acerca de su autoridad. Pocos legos, incluso hoy en día, ven que los médicos a menudo confunden la moral con la ciencia. Gran parte de la teoría y práctica psiquiátricas actuales se basan precisamente en esta confusión¹.
(…)

1 He tratado este tema previamente (Schatzman, 1970). He aquí, brevemente, el nudo del argumento: La tradición de la medicina científica enseña al médico a mantener una distinción entre su actitud moral con respecto a los enfermos y su actitud objetiva no-moral con respecto a sus enfermedades. Pero las ideas morales del psiquiatra y de su sociedad definen qué personas ve, califica y trata como mentalmente enfermas; ve como enfermedad mental ciertos actos <<antinaturales>>, como la homosexualidad. Especialmente si trabaja en un hospital mental, se preocupa de vigilar la moral y de dictar normas. Sin embargo, habla de su trabajo empleando términos que toma prestado del modelo de la enfermedad: <<síntomas>>, <<tratamiento>>, <<remisión>>, <<cura>>, etc. (Véase también Szasz, 1970).

(Schatzman, Morton en: El asesinato del alma. La persecución del niño en la familia autoritaria, 1973)

Voluntad de dominación

27 abril, 2012 Deja un comentario

(…)

¿Vosotros queréis vivir «con arreglo a la naturaleza»? ¡Oh nobles estoicos, qué engaño el vuestro! Imaginad una organización tal como la naturaleza, pródiga sin medida, indiferente sin medida, sin intenciones y sin miramientos, sin piedad y sin justicia, a un mismo tiempo fecunda, árida e incierta; imaginad la diferencia misma erigida en poder: ¿Cómo podriáis vivir conforme a esta indiferencia? Vivir ¿no es precisamente la aspiración a ser diferente de la naturaleza? Ahora bien: admitiendo que vuestro imperativo «vivir conforme a la naturaleza» significara en el fondo lo mismo que «vivir conforme a la vida», ¿no podriáis vivir así? ¿Por qué hacer un principio de lo que vosotros mismos sois, de lo que debéis ser? De hecho es todo lo contrario: al pretender leer con avidez el canon de vuestra ley en la naturaleza, aspiráis a otra cosa, asombrosos comediantes que os engañáis a vosotros mismo. Vuestra fiereza quiere imponerse a la naturaleza, hacer penetrar en ella vuestra moral, vuestro ideal; pedís que esta naturaleza sea una naturaleza «conforme al Pórtico», y querriáis que toda existencia no existiese más que a vuestra imagen, como una monstruosa y eterna glorificación del estoicismo universal. A pesar de todo vuestro amor a la verdad, os constreñís, con una perseverancia que llega hasta el hipnotismo, a ver la naturaleza desde el punto de vista falso, es decir, estoico, de tal modo, que no podríais verla de otro modo. Y, en fín de cuentas, vuestro orgullo sin límites os hace acariciar también la esperanza demente de poder tiranizar a la naturaleza, porque sois capaces de tiranizaros vosotros mismos, pues el estoicismo es una tiranía infligida a sí mismo, como si el estoicismo no fuese él mismo un pedazo de la naturaleza… Pero todo eso es un cuento más viejo que la eternidad: lo que sucedió en otro tiempo con los estoicos se produce hoy mismo desde el momento en que un filósofo empieza a creer en sí mismo. Crea siempre el mundo a su imagen; no puede hacer otra cosa, pues la filosofía es ese instinto tiránico, esa voluntad de dominación, la más intelectual de todas: la voluntad de «crear el mundo», la voluntad de la causa primera.

(…) 

(Nietzsche, Friedrich, en Más allá del bien y del mal)

Las siete máximas de la moral de Pitágoras

24 abril, 2012 Deja un comentario

1. Castiga con severidad a tu hijo culpable de la muerte de un animal, así sea un insecto: el homicidio se inicia así.

2. La felicidad consiste en estar de acuerdo consigo mismo.

3. Sé sobrio: en un cuerpo muy grueso, enflaquece el alma. No hagas de tu cuerpo la tumba de tu alma.

4. No des la mano en seguida: en la duda, abstente.

5. Las mujeres son débiles porque ellas no cuentan más que con el corazón para sostenerse, y el corazón es frágil.

6. Perdónalo todo a los demás, y tú no te perdones nada.

7. No aspires jamás a la vanidad de ser rico, contribuirías a que hubiese pobres.

(RIUS, en Filosofía para principiantes)

La moral

24 junio, 2011 Deja un comentario

Necesitamos una crítica de los valores morales, hay que poner en entredicho alguna vez el valor mismo de esos valores, y para esto, se necesita tener conocimiento de las condiciones y circunstancias de las que aquellos surgieron, en las que se desarrollaron y modificaron (la moral como conciencia, como síntoma, como máscara, como tartufería, la moral como causa, como medicina, como estímulo, como freno, como veneno), un conocimiento que hasta ahora no ha existido y tampoco se le considera deseado.

(Nietzsche, Friedrich, en Genealogía de la moral)

La moral no se enseña

8 junio, 2011 Deja un comentario

La moral no se enseña, como tampoco el genio. La idea que se tiene de la virtud es estéril, y no puede servir más que de instrumento, como las cosas técnicas en materia de arte. Esperar que nuestros sistemas de moral y nuestras éticas puedan formar personas virtuosas, nobles y santas, es tan insensato como imaginar que nuestros tratados de estética puedan producir poetas, escultores, pintores y músicos.

(Schopenhauer, Artur, en La moral, de El amor, las mujeres y la muerte y otros ensayos)

Si eres capaz, finge incapacidad…

7 junio, 2011 Deja un comentario

Aproximaciones

Sun Tzu ha dicho:

1. La guerra es tema vital para el Estado, es la frontera entre la vida y la muerte, la diferencia entre la supervivencia y la aniquilación. Se debe estudiar a fondo.

Li Ch’uan: “Las armas traen problemas. Hay que darle su lugar a la guerra y reflexionar antes de lanzarse a ella.”

2. Debes considerarla según cinco factores fundamentales […].

3. El primer factor es la influencia moral […].

4. La influencia moral la interpreto como la armonía entre el pueblo y sus dirigentes, de tal forma que los apoyarán en la vida y la muerte sin dudar en poner su vida en peligro.

Chang Yu: “Si se trata al pueblo con bondad, justicia e igualdad, y se deposita la confianza en él, el ejercito estará espiritualmente unido y todos apoyarán a sus jefes. En El libro de los cambios se lee: “Con la alegría de superar las dificultades el pueblo olvida el riesgo de la muerte.”»

7. Mandar, significa entender las cualidades de inteligencia, igualdad, humanidad, coraje y severidad del general.

Tu Mu: “… Si el jefe es sabio, podrá reconocer los cambios de las circunstancias y actuar con diligencia. Si es justo, sus tropas confiarán en las recompensas y los castigos. Si es humanitario, amará al prójimo, compartirá sus sentimientos y estimará su trabajo y sus dificultades. Si es valiente, vencerá aprovechando sin vacilar las oportunidades. Si es severo, sus tropas le obedecerán porque temerán el castigo.”

17. El engaño es la base del arte de la guerra.

23. Finge inferioridad, estimula su arrogancia.

25. Divide al enemigo que esté unido.

(Tzu, Sun, en Aproximaciones, de El arte de la guerra)